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Desde la vereda de La Zorra, corregimiento del
Chingón, departamento de Putumayo...
Entusiasmo camaradas!
Puden cantar en coro la buena nueva sobre la llegada del nuevo y muy erudito doctor in causa, y alzar sus plagarias al altísimo agradeciendo la presencia del angel salvador y gran jerarca de la Cofradía del Divino Rostro. Sin embargo, carísimos toches, es mejor que vallan sabiendo que las escolásticas y herméticas enseñansas del doctísimo nunca llegarán a tener ese influjo sobre las masas que tan solo un baron egregio puede ejercer. Dudosamente serán aguita para mi gente y jamás se presentarán en compañía de atractivas damicelas, junto a esa ropita apretadita que sólo Marbelle sabe usar.
Pecan ustedes, intelectuales de paparrucha, pues al encerrarse dogmáticamente en su alabanza del divino rostro, haciendo de Duns Escroto su santo de devoción, sólo logran hacer lo de la avestruz: meter la cabeza (pueden entender lo que quieran) en el hueco. El mundo está puesto para ser conquistado, y ante tal panorama las únicas vías son las de facto. El cosmos se puede comprar, las estrellas se pueden poseer, las personas cambian con el olor del dinero, de la fama y el poder. Mis afirmaciones son ciertas, y el estado actual de las cosas hacen de mi discurso no una sarta de
insultos sin fundamento sino una postración radical ante los hechos: el Adán de la cofradía, el Mono gestor de lo que antes fue un paraíso y hoy un infierno donde imperan las leyes del ovejo, aquel, les digo, que alguna vez se autodenominó como el último de los metafísicos y que cuestionó la autoridad hasta jartarse, aquel que nunca conoció los límites de la cordura tiene sobre su espinazo las evidentes marcas de la flagelación liberalista. He leído, mis tristes
pedantines, una rendida declaración tácita de acogimiento al régimen en la cual el otrora punzante y pícaro Esteban, en reciente comunicación a la revista
non sancta, se derrite en alabanzas de hórrido lamezuelas y nos priva de su tantas veces elogiado picante. Para el efecto, siendo lo ramplón que soy,
pero con las arcas tetiaditas de dinero, me he dado a la tarea de componer este imperfecto soneto:
Leístes de chiquito a Condorito,
grandecito de la mofa hiciste un don
pero en London te volvistes maricón
al cambiar a Pepón por Williamcito:
Yayita, semejante bomboncito,
de Julieta la volviste aberración,
y ahora en cambio de exigir explicación
contemplas el espectro del papito!
"I love London", you reply, "god save the queen"
"The Beatles are the best!" yo diría ruido,
desconoces tus raices, no seas ruin.
Conocete a ti mismo, malparido.
al delirio de realeza ponle fin,
de Reyes tienes sólo el apellido.
Así, derrotados miembros de la cofradía, imploren por
mi misericordia, el plan está consumado....
WATER FOR MY PEOPLE!!!!
GEORGE MALE.
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